Es bien sabido que actualmente se utilizan soluciones aproximadas computacionales para calcular el comportamiento de los materiales en cualquiera de sus estados, sólido, líquido o gas, apoyando dichos cálculos con ensayos y pruebas experimentales: En el caso de los fluidos (p.ej. cálculos aerodinámicos) se utiliza el túnel de viento, y para sólidos (p.ej cálculos estructurales), ensayos de materiales. Estas operaciones de cálculo y comprobación encarecen en gran medida los productos resultantes.
En este sentido, el esfuerzo de investigación que hemos realizado todos estos años se ha visto recompensado con el descubrimiento de una nueva Teoría de Sustentación Aerodinámica, que hemos englobado dentro de la Teoría Geométrica de los Fluidos, sobre las cuales estamos escribiendo un libro. En estas teorías se explica de manera precisa y se demuestra matemáticamente como se produce la sustentación aerodinámica y la resistencia de un objeto sumergido en un fluido en movimiento, y como se desarrolla el fenómeno de la turbulencia.