Ahora bien, es por medio de las matemáticas por donde podemos plasmar las abstracciones en un lenguaje formal, que a su vez nos permite demostrar que si partimos de una suposición verdadera y damos los pasos adecuados, llegamos a una conclusión verdadera ( o falsa). Pero debemos estar muy seguros que el punto de partida sea verdadero (o falso), pues si no, no podemos asegurar que lo demostrado sea también cierto (o falso).
BUSCAMOS LA INSPIRACIÓN EN LA PROPIA NATURALEZA
Observamos cómo la naturaleza actúa y utilizamos la capacidad de abstracción para trasladar a nuestros modelos fisico-matemáticos esas «leyes» que siempre han estado ahí, esperando ser interpretadas. Pero debemos intentar que nuestra traducción sea lo más fidedigna posible, y en cada generación acercarnos más y más a la realidad a través de nuestras abstracciones.
Según los neurobiólogos, el principal rasgo que nos distingue del resto de las especies es el tamaño del neocórtex, y señalan ya desde Ramón y Cajal que tanto la capacidad de abstracción como el arte de inventar se producen gracias a la intervención de dichas áreas. A estas ventajas que se derivan del uso de la neocorteza debemos añadir otra más: la capacidad de compartir, en vez de competir. Creemos que esta debería ser la esencia y razón finales de nuestro triunfo en la evolución, ya que esa capacidad nos puede permitir seguir al pie de la letra las leyes de la naturaleza, de autorregulación, sostenibilidad, y equilibrio, sin perjudicar al resto de seres vivos.
Pero para ello debemos antes haber entendido bien cómo actúa la naturaleza.